Os traemos una excursión en familia fácil de hacer. Se trata de Urko Ibilbidea, un paseo peatonal que une las localidades de Markina y Etxebarria (Bizkaia). El recorrido, de aproximadamente 5 kilómetros (ida y vuelta) discurre junto al río Urko y es muy chulo. Al no tener apenas desnivel y ser bastante amplio, se puede hacer con el carro de bebés perfectamente.
El itinerario de Urko Ibilbidea
El camino comienza en el portalón del Palacio Munibe, al lado de la carretera que une Markina-Xemein con Etxebarria en la comarca de Lea Artibai. Para quien conozca la zona, hay que atravesar la campa conocida como ‘zelaia o praue’ y en pocos metros a la derecha encontraréis la entrada.
A lo largo de nuestro camino disfrutaremos de pequeñas cascaditas de agua, antiguos molinos, casas torre y ferrerías de gran valor histórico y patrimonial. Entre ellas, se encuentra el precioso Palacio Ansotegi, reconvertido hoy en día en un hotel y restaurante. Para seguir el camino deberemos pasar por el puente del mismo nombre, donde descubrimos, gracias a uno de los paneles informativos que tenemos a lo largo del recorrido, que en la edad media era un obligado peaje para acceder a Etxebarria. Este dato nos pareció curioso. La verdad, es que los paneles que encontramos en el sendero eran muy interesantes para conocer la historia de los edificios y situaciones de épocas pasadas.
Al final del camino nos encontramos con un skate park donde los peques aprovecharon para jugar un rato. A la vuelta, en Markina, nos paramos en la pastelería Tate, como no podía ser de otra manera, a coger fuerzas para continuar hasta la peculiar ermita de San Miguel de Arretxinaga. Un curioso edificio que esconde tres enormes piedras en su interior. Os recomendamos que si estáis por la zona, no os vayáis sin verlo.
En definitiva, Urko Ibilbidea es una escapada con peques fácil y bonita.